La vitivinicultura en Aguascalientes, más mito que realidad

“ El vino se hacía de azúcar 

de caña, no de uva”

 “Siete kilos de uva en cada botella”, sólo un slogan

La superficie destinada al cultivo de la vid sólo era un parapeto

Parte I

Matías Lozano Díaz de León 

www.cortandoporlozano.com

Aguascalientes llegó a ser considerado entre las principales regiones productoras tanto de uva como de vinos, y existe la idea generalizada, de que la decadencia de esa actividad casi hasta su extinción, se debió a la entrada de productos vitícolas de otros países, principalmente de la república de Chile. 

Sin embargo, las versiones del Dr. Eduardo de la Cerda González y del Ingeniero Carlos Delgado Mendoza ( quien
se declara causante indirecto de la desaparición de la Vinícola de Aguascalientes , propiedad de don Nazario Ortiz Garza, muestran lo que nadie, excepto quienes estuvieron relacionados con la vitivinicultura en el Estado, pudieron imaginar: que esa actividad, que tanto significó en el desarrollo del Estado murió, al descubrirse que la base de la producción de vinos no era la uva, sino el azúcar de caña. 

¿DE QUÉ ESTAMOS HABLANDO? 

De que nunca hubo “siete kilos de uva en cada botella”, que la vitivinicultura en Aguascalientes fue más un mito, que realidad.

Y, aunque la plantación de vid, se extendió, llevando opulencia económica a centenares de ejidatarios, la producción no era suficiente para elaborar los miles de litros que salían de las destiladoras.


Por eso, al crearse la Norma Oficial Para el Brandy, se cavó la tumba de la vitivinicultura de Aguascalientes. Esa debacle económica se hubiera evitado, si en lugar del azúcar de caña, se hubiese recurrido al azúcar de remolacha. 

¿Cómo llegamos a esa conclusión?  Por las revelaciones que nos hizo el Dr.  Eduardo de la Cerda, fallecido recientemente, entrevistado en diciembre del año 2002, en busca de información para identificar la procedencia de centenares de botellas de vino tinto, halladas en un túnel en medio de una parcela, en el poblado Villa Juárez, del municipio Asientos.

 Al caer su perro al vacío, un joven campesino hizo accidentalmente el hallazgo de un pozo que conecta a un túnel.

Lo más importante de lo observado, es que no se trata de ninguna antigua cava (en principio se pensó que pudo haber pertenecido a los hacendados de la región), sino, con toda seguridad, de un producto que elaboraba hacía poco más de una década don Eduardo de la Cerda y que marcaba con el nombre de Los Pioneros", según opinión del ingeniero Javier Ambriz Aguilar, experto vinícola; ello, a juzgar por los nombres que aparecen en los corchos que guardan el liquido en las botellas de vidrio verde, y lisas, que se tuvieron a la vista, de las cuales se guardaban muestras.

Con la información disponible, que recabamos para el malogrado quincenario “Reporte Político Policiaco”, que a la sazón publicábamos, buscamos al Dr. Eduardo de la Cerda, por sus conocimientos en materia de Enología. 

“Yo lo hice, es un Pinot Nuart, afirmó, de entrada,  el entrevistado, médico por profesión, presidente de la ACIUAA, y Enólogo por afición-, quien, así desentrañó el misterio. Sólo faltaba saber a quién pertenecía ese vino y porqué estaba en una noria.

“Se me hace extraño, pero como yo no estaba directamente relacionado con comercialización, no pudiera tener la certeza de a quien se le haya podido vender este producto. A mucha gente le gustó, se fue acabando a lo largo del tiempo. Yo hubiera pensado que era más Cabernet Sauvignon, pero no, este vino es de un lote muy especial que hicimos, ¡muy especial!

RPP.- ¿Queda algo en bodega de aquel vino, de aquellas 15 mil botellas? 

“Creo que si, yo ya no tengo que ver directamente con ello, los herederos de mi hermano Gustavo están al frente de todo, pero debe de haber unas cuantas botellas de este vino Pinot Nuart”. 

 La Historia, el mito de la Viticultura en Aguascalientes, 

referida por el Dr. Eduardo de la Cerda González y el 

Ingeniero Carlos Delgado Mendoza.

Independientemente de todos los estudios médico clínicos que tenía, Eduardo de la Cerda hizo una maestría en la Universidad de Davos en Bioquímica Enológica, y estuvo diez años dedicado a la fabricación de los vinos al lado de su padre , Domingo de la Cerda , lo que le permitía hablar con autoridad, al respecto.

"Nosotros fabricamos y maquilamos para una gran cantidad de personas, no solamente plantamos nuestras cepas, las que consideramos las más convenientes. Trajimos cepas de Europa, de California, de Alexander Valley, Napa Valley, de Sonoma, de Mendocino; y éstas se desarrollaron perfectamente bien en los viñedos que nosotros teníamos: 

Desde cepas blancas y cepas tintos, de los vinos tintos que nosotros hicimos fueron fundamentalmente Cabernel Sauvignon. De este Pinot Nuart , excepcional, una sola vez hicimos. De blancos teníamos unas variedades muy grandes: Nigustra Miner, Savignon Blanc, teníamos Shening Blanc, teníamos Semignon, una gran cantidad de vinos blancos extraordinarios. 

De vinos tintos, la cosecha 83 ganó un premio en Europa, en una cata abierta y fuimos los únicos envasadores de vino en América que teníamos opción de exportar a la comunidad europea, específicamente a Alemania, vino tinto; y exportamos alrededor de 18 contenedores de Cabernet Sauvignon cosecha 83, y nos compraron otros diez contenedores de Cabernet 84”. 

Cuando llegamos a la entrevista con el doctor Eduardo de la Cerda, a su oficina de la Asociación de Catedráticos e Investigadores de la Universidad Autónoma de Aguascalientes -ACIUAA-, de la que era presidente,  se encontraba también al ingeniero químico Carlos Delgado Mendoza, a quien nos presentó: -"El fue de las personas que estuvieron involucradas aquí en Aguascalientes, con la certificación vinícola. El perteneció a un grupo especial de la SECOFI (la entonces Secretaría de Comercio y Fomento industrial), que era la Dirección General de Normas. Cuando se iba a hacer la norma de calidad del brandy, ellos se movieron por todas las regiones vitivinícolas, él es una de las personas que más enterados están de la situación de la vitivinicultura en Aguascalientes: de cómo se hacia el brandy aquí, Y quiénes eran los que más azúcar de caña consumían, entre los cuales estaba nuestro prócer de la viticultura, don Nazario Ortiz Garza, quien fue el que más utilizaba azúcar de caña. 

Carlos Delgado Mendoza, a su vez, reiteró que de hecho, cuando se iniciaron los estudios para crear la norma oficial mexicana para el brandy, ellos contribuyeron a que la empresa Vinícola de Aguascalientes, se viniera abajo; “indirectamente, porque nosotros como dependencia de gobierno, teníamos la obligación de hacer cumplir la norma, y la norma decía que el brandy debía de hacerse de uva, cien por ciento;  y resultó que todas las empresas de Aguascalientes, Coahuila, Sonora, etcétera, usaban principalmente azúcar de caña”. 

Cuando Carlos Delgado vino por primera vez a Aguascalientes, lo hizo a la Compañía Vinícola de Aguascalientes, y Eduardo de la Cerda estaba involucrado en ese sistema, para detectar si realmente el vino era de uva o era de caña de azúcar, y las pruebas se hacían por medio del carbono 14. (Continuará