El remate de la Compañía Vinícola de Aguascalientes

Ejidatarios del Estado estuvieron 

a un paso de adquirirla: Ambriz

"Polvos de aquellos lodos"

Parte II y última.

La Importación de Mostos y el ingreso al

GAT acabaron con esa actividad en México 

Por Matías Lozano Díaz de León 

www.cortandoporlozano.com

cortandoporlozano@gmail.com 

"De puros impuestos federales por la producción vitivinícola, se generaba una cantidad enorme de dinero para la Federación, por lo que el gobierno del estado bien podía ir a negociar en México y pedir para Aguascalientes, mayores participaciones": Javier Ambriz Aguilar . 

RPP.- ¿Cuantas vinícolas habrá llegado a tener Aguascalientes?

—Llegó a haber 36 registradas, cuando todo esto iba viento en popa. La debacle de la vinicultura nacional -porque a nivel nacional llegó a haber más de 100 mil hectáreas plantadas de vid- comenzó en el momento que México se integra al GAT. No pudimos competir y empezó a entrar aguardiente (base para la fabricación de brandy) de Argentina, Chile; España principalmente, muy baratos, tan baratos, que si aquí nos costaban diez pesos producir un litro de vino, ellos lo ponían aquí, en México, a 2.50 pesos ¡al 25 por ciento del valor! Lógicamente entre los industriales también se hizo un gran monopolio: se viene a pique don Nazario Ortiz Garza; por su edad, por su estructura empresarial, por lo que haya sido, su empresa se va a pique, se va a pique Vergel, se van a pique todas las empresas y surge el monopolio de Pedro Domecq, muy consolidado, con muchos recursos. Ellos son de los primeros que empiezan a importar aguardiente, y estamos hablando de que hubo un momento en que la demanda era de 100 millones de litros de vino para destilar. Es un volumen enorme, eran buques petroleros que llegaban a las costas mexicanas, sobre todo a Veracruz y a Tampico, cargados de aguardiente de otros países, al 25 por ciento de lo que costaba producirlo aquí. Esa fue la razón de la quiebra de la viticultura nacional, no porque hubiera improvisación. Aquí hay muy buen clima, buen suelo, bases muy sólidas. Ya te digo, la viticultura empezó con gente que sabía de viticultura, no fue de que ‘Juan Pérez’ se metió al negocio y ya, le fue bien. No. Había toda una tradición, porque la mayoría eran familias que conocían de la producción vitícola y de los vinos. 

RPP.- Entonces la caída de vinícola de Aguascalientes fue simultanea con el auge de producción de uva en terrenos ejidales?

-Lo que pasa que ahí, como había un mercado enorme de brandys, había que comprar uva necesariamente, y entonces la uva tenia una gran demanda, era insuficiente la producción de uva que había para abastecer el ritmo acelerado de la industria de los aguardientes y de los brandys, entonces coincide que hay esa necesidad de aguardientes, México entra al GAT, pero importar es mucho mas barato que comprar aquí, que seguía siendo el problema , porque las empresas no que comprar las poquitas uvas que hay aquí, porque definitivamente les sigue costando mucho mas barato importarlo que comprarla aquí, esa es la razón, y entonces como todo el ciclo del mercado también coincide que  la empresa Bacardi comienza tener un crecimiento terrible y le inyecta muchos recursos, ya ves que es una empresa mundial, hay bacardi en todo el mundo, entonces un brandy de mucha tradición se empiezan a meter mucho en la publicidad y el gusto de las gentes por la bebida con las generaciones cambia, y el ron que estaba en la banca empieza a crecer y a crecer pero además por la campaña de desprestigio que se hace de los brindis:  que eran adulterados, que eran alcohol vil... hay algo de cierto en esto, y entonces hay el gran repunte del ron, y los brandis se vienen a pique.

-Empiezan a cerrar muchas empresas, y al cerrar las vinícolas que no tenían a quien venderle, porque a final de cuentas éramos maquiladores, comprábamos uva o producíamos uva, la trasformábamos, le dábamos un valor agregado pero no teníamos, de las 36 vinícolas, 3 o 4 tenían marcas propias, las otras no, nosotros ahí en la familia le vendimos lo mismo a Martell que a Vergel que a Domecq, éramos finalmente maquiladores, entonces llegó a haber una sobre oferta por la entrada de los aguardientes, pues llegó un momento en que ya fue incosteable, y todas las plantas de las 36 vienen a pique, a menos, menos y entre esas la primera que se fue, fue san Marcos, porque ya no pudo competir con los otros pulpos.

Los ejidatarios, que tenían una superficie muy importante de viñedos -llegaron a  tener más de 3 mil hectáreas, y tienen su propia planta, ellos, que les financia Banrural, también para hacer vinos para destilar y también ellos son maquiladores, porque al momento que nadie les compra, les llega el agua al cuello, tenían sus carteras muy sanas, números negros, pero ante la situación de los precios muy bajos de la uva y que no había a quien venderle ni la uva ni los mostos,  entonces se dio una solución, que fue asociarse con vinícola Aguascalientes, en unos términos desastrosos, porque a la vez tratamos de formar una asociación rural de interés colectivo entre varias empresas aquí y comprar todas las instalaciones de vinícola Aguascalientes.

Yo, en lo personal tuve la oportunidad de que este grupo de inversionistas que iban a participar ahí, me nombraran presidente del consejo de administración, entramos en negociación con don Nazario, tuvimos muchas reuniones en México y bueno, ya el día que él tuvo un problema, que llegaron a  tener adeudos fiscales muy fuertes, por esta cantidad de recursos muy fuertes que te digo que manejaban.

RPP.- Sus secretarios?

No, don Nazario, entonces una manera de recapitalizarse para resarcir sus deudas con Hacienda que eran muy fuertes, pues era vender parte de las acciones de su empresa, y ahí es donde nosotros, un grupo de personas, le habíamos comprado el 51 por ciento y por esa razón, yo fui nombrado el presidente del consejo de administración, y ya estábamos a punto de finiquitar, de ir a  Hacienda para hacer nuevos acuerdos para que dieran facilidades de pagar los impuestos que se debían y todo, en equis numero de años; y una reestructura en algunos bancos, y que nosotros nos hiciéramos cargo directamente de la empresa.

Don Nazario ya estaba muy mal, lógicamente en esto el gobernador en turno tuvo mucho qué ver, porque fue el que medió las pláticas, y se veía que la única solución era esa, juntar a las vinícolas y a los productores en esa misma empresa: la marca tenía prestigio, presencia y todo mundo hasta hoy día la conoce, entonces ya no había que hacer una marca nueva, un nuevo producto, si no conservar lo que había sido tradicional aquí.

Cuando ya estábamos a punto de firmar aquello, el sentimentalismo,  incluso de varios de los allegados de don Nazario, lo impidió; ya estaba pegándole a los 88 u 85 años, porque vivió 96 años; ya estaba en unas condiciones físicas muy deplorables, y en gran medida eso influyó para que decidieran esperar “a ver que resulta”, y finalmente aquello no se hizo.

Lo que sucedió también, es que nosotros tuvimos acceso a la información de los activos de la empresa, a los estados financieros y contables; en aquel momento tenía activos por valor de unos 3.5 millones de pesos, y ya al año siguiente, o dos años, no sé, entran unos empresarios de la Laguna, los Manssur, Hassam Manssur, y dos hermanos, de Torreón, no recuerdo el nombre, gente muy prominente, y la misma operación que se iba a hacer con un grupo de inversionistas aguascalentenses la hicieron ellos, ellos le compraron a don Nazario la empresa más o menos en esa cantidad, pero en la negociación, como ellos le pagaron de contado, les hizo algún descuento.

 Yo creo que la empresa la vendieron en menos de 3 millones de pesos, claro, quedándose con los pasivos y la reestructura y todo lo que había que hacer con Hacienda, y después al poco tiempo se firmaron convenios con la Unión de Ejidos Lázaro Cárdenas; los nuevos dueños de la vinícola, les venden parte de las acciones a los ejidatarios, para que pudieran meter ahí su producción directamente, tanto la uva como el mosto que pudieran hacer, todavía me tocó ver esos contratos, en calidad de presidente de los vitivinicultores,  y ya para ese tiempo hicieron una reevaluación de los activos, pero ya de los 2 millones y medio o 3 que pagaron por ella,  la habían inflado como hasta 8 millones, y de estos 8 millones a los ejidatarios les recibieron toda la uva y les pagaron con acciones, la uva y el vino se las pagaron con acciones, pero ya sobre el valor de los 8 millones, entonces, lo que compraron por menos de tres millones, a los campesinos se la vendieron en 8 millones. Lógicamente todo este dinero que los ejidatarios inyectaron en su producto, eran créditos de Banrural,  y pronto cayeron en una cartera vencida en la que tengo entendido nunca salieron, por la muy mala negociación que hicieron, no se si hubo responsables o no, yo lo único que se es que los timaron.

Había un fideicomiso de comercialización: el señor José Barba González fue designado por Héctor Hugo Olivares (dirigente de la CNC), director o gerente general para manejar toda la comercialización de productos agropecuarios a nivel nacional.

Este fideicomiso empezó a intervenir en la comercialización del algodón, de la uva, del ganado, de los chiles, la idea era una gran comercializadora de la producción de los ejidatarios, de donde lo solicitaran: si era Sinaloa y tenían garbanzo y fuera barato le entraban no, si era en Zacatecas y había chile en la zona de  Calera y Fresnillo, pues le entraban a la comercialización, pignoraban los productos. Este fideicomiso le pagaba al banco los créditos de los campesinos, guardaban el producto y luego ya de ahí buscaban mercados a nivel internacional, creo que muchas operaciones funcionaron, lógicamente, no todas, otras fueron muy desastrosas, como es el caso del propio producto de la viticultura.

RPP.- Pero entonces, al rematarse la vinícola, los ejidatarios que formaban la Unión de Ejidos seguían siendo socios?

“Lo que no se, es si el banco se quedó con las acciones, alguien se quedó con las acciones pero esas acciones eran de los ejidatarios, pero como a su ves ellos le debían al banco, no se si el banco se los quitó, o los haya embargado. Lo desconozco.

RPP.- El banco les recogió las instalaciones que tenían en Cañada Honda?

“ESE FUE otro crédito,  que les dieron aparte: primero fue lo de Cañada Honda, yo tengo entendido que en aquel tiempo Banrural le llegó a financiar a la Unión de Ejidos mas de 10 millones de pesos, todo el dinero del mundo, con ese dinero le compraron la vinícola a don Benjamín Ramírez, se llamaba Bamsa, estaba enfrente de Cañada Honda, las instalaciones y dos o tres hectáreas de cultivo; una finca que tenían ahí la utilizaron como bodegas, ese fue el despegue, el tirón final y ya después Valente Arellano por eso te lo mencionaba, que incluso yo me lo llegué a encontrar aquí, vivía en el hotel Francia, era el técnico que estuvo manejando los últimos años que operó la vinícola, cuando nuevamente la estuvieron impulsando. Llegaron a vender, según me platicaba Valente, cerca de 100 mil cajas todavía en los últimos años, una cantidad importante, pero no tan importante como llegó a ser la época del auge del brandy, principios de los 80, que de puro brandy se hacían 3 y medio millones de cajas, pero repartidas entre todas las vinícolas, la de Baja California, la del Valle de México que ahí estaba la mayoría, las de Querétaro, las de la Laguna, las de la zona de Saltillo y las de aquí. ¡Tres millones y medio de cajas de brandy en el mercado!