Por Madero
Héctor Ruiz Esparza
Aguascalientes, Ags, a 18 de marzo de 2024 d.C.
A la muerte de su padre Marcial Miramontes: Josefa, Pedro, Arnulfo y su madre María del Refugio Romo de Vivar, se trasladaron al Estado de Aguascalientes y así radicar en esta ciudad de Aguascalientes.
Según Datos Biográficos de 1929, Arnulfo Miramontes, tomo sus primeras lecciones de Solfeo, teoría y piano del maestro José H Azios. A la edad de 13 años se hizo cargo de la plaza de Organista del Santuario de Guadalupe.
A la edad de 17 años, se fue a Guadalajara, Jalisco a estudiar formalmente con el maestro Francisco Godínez; Piano, Órgano, Armonía, Contra-Punto y Composición.
En el año de 1908, partió para Europa, a Alemania y a la ciudad de Berlín en particular e integrarse al “Sternsches Konservatorium”.
A su regreso permaneció en la ciudad de Aguascalientes aproximadamente dos años, tiempo en el que trabajó intensamente y sin descanso en todas las ramas de la música, en esta época compuso: Primera Sinfonía en sol menor; Concierto en Mi mayor para piano y orquesta; Poema para Solos, coro y orquesta; Cantata para solos, coro y orquesta; Ecce Sacerdos para solos, coro y orquesta entre muchas más.
Arnulfo Miramontes Romo, fue un compositor de mucha producción, según su catálogo se cuentan alrededor de 200 obras que van desde piezas musicales para niños o principiantes, preludios, y estudios hasta Sinfónicas, Operas, Cantatas, Romanzas, Ecce Sacerdos Magnus y su inigualable Misa de réquiem.
De acuerdo al gran trabajo que realizo Bernardo Giménez Casillas en elaborar el catálogo de obras del maestro Arnulfo Miramontes Romo, se tiene conocimiento que escribió 183 diferentes obras musicales.
Se resguardan o se tiene las obras físicas un total de 138 y se cuenta con menciones en diferentes medios de 45 mismas que se catalogaron como no encontradas.
La clasificación que se utilizó para hacer el catálogo fue: -obras para piano-obras orquestales-obras para canto y piano-obras de música de cámara-obras para órgano-obras para coro y-óperas
En el documento de obras se enumeran 99 obras para piano, 24 orquestales, 14 para canto y piano, 8 de música de cámara, 6 piezas musicales para órgano, y 25 para coro.
Escribió tres óperas: Anáhuac y Cíhuatl, basada en el México prehispánico, y Juana de Asbaje, basada en la poeta Sor Juana Inés de la Cruz del siglo XVIII (no encontrada).
Por esta ocasión haremos un breve recuerdo de fechas y obras estrenadas en forma cronológica de alguna de sus composiciones orquestales.
En 1916, obtuvo el primer lugar en el concurso de composición con su Cuarteto en Re Menor el cual interpreto el Cuarteto Saloma y estrenó su Primera Sinfonía en el teatro Abreu.
En el año de 1918, la Orquesta Sinfónica Nacional estreno su Suit Sinfónica Mexicana, bajo la dirección del autor.
En ese mismo año se presentó su Misa de Réquiem en la Sala Wagner, repitiéndose en la Unión Filarmónica con una conferencia del doctor Alfonso Pruneda.
Asimismo el maestro Arnulfo Miramontes, sorprendió al mundo de la música con la presentación de su ópera “Anáhuac” en el teatro Virginia Fábregas, y Colón en la ciudad de México, tiempo después se llevó a escena en el teatro Degollado de Guadalajara.
La Sonata para violín y piano fue maravillosamente interpretada por el maestro José Rocabruna, con el acompañamiento en el piano del propio autor, el 21 de agosto de 1921 en el teatro Ideal de la ciudad de México.
Por el año de 1923, la Universidad de Columbia al conocer sus éxitos, le invitó para ofrecer un concierto de sus propias composiciones, en que tomó parte la notable soprano María Luisa Escobar de Rocabruna y la poetisa chilena Gabriela Mistral, quien presentó al maestro Miramontes y ofreció una conferencia.
Con el propósito de conmemorar el aniversario de la Revolución Mexicana, el compositor Miramontes, creo el Poema Sinfónico de la Revolución, obra escrita con sinceridad y cariño a México, en sus acordes palpita el acento trágico y dolorido de nuestra raza, la cual fue estrenada en el año de 1936 en la sala principal del Palacio de la Bellas Artes.
En 1938 estrenó en el Anfiteatro Bolívar de la Escuela Nacional Preparatoria, la Misa Solemne para coro y órgano en modo hipodórico. Como intérpretes en este magno evento estuvieron el Coro Bach y el organista Jesús Estrada.
Entregado a la tarea de componer produjo se segunda ópera “Cihuatl”, con ejecución de gran alcance y sublime belleza que interpreta a los más bellos pasajes de la mitología Azteca.
En 1939 término su Segunda Sinfonía. En 1940 dio a conocer su Ballet Sinfónico “Iris” en el Anfiteatro Simón Bolívar
Sus oratorios, primero y segundo en 1943 y 1944 respectivamente y en 1947 su Tercer Sinfonía.
En 1951 terminó la trascripción de la Suite Sinfónica Mexicana para piano y la edición de su Sonata para violín y piano, y Preludio y Fuga en La menor para órgano.
En la terraza del histórico Castillo de Chapultepec, el domingo 7 de septiembre de 1952, en el marco de una serie de conciertos patrocinados por la Universidad Autónoma de México, dirigió su Concierto Nº 1 para piano, teniendo como solista a su discípula la señorita Esperanza Cabrera, quien con su ejecución compartió con su maestro los aplausos y la admiración de los críticos musicales.
En marzo de 1959, en el palacio de las bellas artes, el maestro francisco Sarvin dirige a la orquesta sinfónica nacional e interpreta su segunda sinfonía.
Para el mes de septiembre de 1959 el INBA organizó el Festival de Música Sinfónica de Compositores Mexicanos a celebrarse en la sala magna del Palacio de las Bellas Artes y el día 9, con la orquesta sinfónica nacional bajo la batuta del extraordinario director Eisenberg se interpretó su Ballet Sinfónico “Iris”.
Allegro Scherzando es interpretado en 1960 por The South shore String Ensemble en el Oscanside Higt School auditórium de Nueva York teniendo como director al maestro William W. Lockwood.
Arnulfo Miramontes Romo de Vivar muere en el Hospital Español de la ciudad de México el 13 de marzo de 1960.
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