Cortando por Lozano
Tema 1.-
· El debate de la COPARMEX
· “Dejemos la familia al
margen”: Zamarripa (PRI)
· “Ni me rajo, ni me rindo
ni me vendo”. Salas (PAN)
· Gutiérrez Castorena (MORENA): ¡Duro contra el gobierno”
· Gwendolin Rodríguez (PES): “El PT agrede a las mujeres”
· Miguel Angel de Loera (PT): “¿Y el precio de la gasolina?”
DE
HECHO LOS “Ganadores” fueron precisamente los de la Coparmex, suponiendo que en realidad pagaron los cien pesos de su boleto
de entrada los cerca de 250 asistentes; sería deshonesto que entraran sin
pagar. Y ni volteen a verme, porque intenté pagar y los del PRI no me dejaron,
si pagaron o no, es otra cosa...
LOS
CIEN PESOS daban derecho a compartir con los de la mesa una charola de botanas
y agua “de sabor”, y refrescos “Big”. El sonido, malito; había que estar cerca
de las bocinas o en la dirección de salida, para entender lo que se decía ...
EN
LA PRIMERA participación de la candidata del PES (Partido
Encuentro Social). Gwendolin Rodríguez, el moderador se vio en la penosa
necesidad de llamar al orden a los porristas del PT, que se instalaron en el
fondo. A la vez, Gwendolin hizo un reclamo al candidato del PT, Miguel Angel de
Loera, “por permitir que su equipo de prensa agrediera a las mujeres”. El
aludido dijo desconocer el tema. Más tarde, insistentes invitaciones por
Facebook de “Blogueros al debate” y “Radiogama 2014” a escuchar “los escándalos
sexuales de Gwendolin”, nos llevaron a entender el enredo político que se traen
PT y PES...
CUANDO
CALIFICAMOS de “buen debate” nos referimos a que hubo dos o tres detalles
interesantes que, de conocerlos la ciudadanía del Distrito 1, influirían sin
duda en la elección del diputado federal, el próximo domingo...
EL
DEBATE LO POLARIZARON los candidatos del PAN –Gerardo
Salas- y del PRI –Gregorio Zamarripa-, y cada uno con líneas muy diferentes: el
primero con machacona insistencia en el ataque personal incluso, y el segundo
con actitud más propositiva, con invitación expresa al panista, a dejar de lado
las cuestiones personales, la guerra sucia, pero su contrincante habría de
definir su postura, muy radical: “No me
rajo, ni me rindo ni me vendo”...
EN
LOS MOMENTOS previos al inicio del debate se notaba un ambiente parecido al del
Auditorio Morelos cuando en el acceso a los vestidores se asoman los primeros
enmascarados del encuentro de lucha libre. Muchos espectadores con aspecto de
espectadores, políticos, líderes de opinión, líderes sociales, representantes
campesinos, nada a la vista...
EL
CANDIDATO DE MORENA, Daniel Gutiérrez Castorena, de traje, como se le ve
siempre al catedrático y político; la representantes del PES, Gwendolín Rodríguez,
con blusa blanca y pantalón oscuro; el del PAN, Gerardo Salas, en combinaciones
muy parecidas a “uniforme”, salvo por el pantalón, más claro, de mezclilla y
cinto piteado, con su nombre, como para evitar confusiones o por si alguien no
sabe quién lo porta; también de camisa el del PT, en tono cercano al marrón y muy alejado del rojo o amarillo...
GREGORIO
ZAMARRIPA, DEL PRI, “hijo de campesinos”, según
el currículum vitae que de él se leyó, también vistió de traje, que es
habitualmente su vestimenta, porque de ordinario se codea con gente “de pomada”;
presume, y con razón, lo que se ha superado, así lo describió el moderador al
leer su origen y sus estudios, su maestría en España, su doctorado en México,
su trabajo de mucho tiempo por los derechos humanos...
GERARDO
SALAS fue quien encendió la mecha, al señalar como punto destacado en su
currículum vitae, que es “padre de familia ejemplar”, referencia que en nadie (de
la gente de la política, claro está, dejó dudas de que ponía el dedo en la llaga
por las diferencias de Gregorio con su esposa, no obstante que sus hijos lo
acompañan y apoyan en todas las actividades de campaña. Gregorio respondería en
su momento, en tono totalmente distinto: la invitación directa al panista para
dejar a las familias fuera de la campaña, y que fue como bordar en el vacío...
LUEGO,
EN SU PRIMER turno Salas habló de lo que haría
por combatir la corrupción y cerró su intervención subrayando que “precisamente
por eso” se encontraban en ese debate como parte de la campaña por la
diputación federal del Distrito 1, “porque alguien hizo trampa –sic-“...
NO
FUE LEJOS POR la respuesta, que al parecer no se la esperaba, porque Zamarripa
le espetó que ciertamente estaban ahí,
“por una trampa y una farsa”, y retó al candidato del PAN a negar las
relaciones incluso familiares de altos militantes panistas (y dio “pelos y
señales” de ellos”), con magistrados del Tribunal Federal Electoral que declararon nula la votación del 7 de junio, que
daba el triunfo al candidato del PRI...
SALAS
SALIÓ DEL atolladero con el pretexto de que “lo de la trampa” no lo dijeron los panistas, y sin embargo volvería a mencionar lo
de la “trampa”, dejando constancia de que esa es su línea y que la seguirá,
quizá aún después de los resultados del domingo 6 de diciembre...
DANIEL
GUTIERREZ Castorena se significó por sus críticas al gobierno pero apoyado en
información documentada,; Miguel Angel de Lorena, por su deseo de servir a los
habitantes del Distrito 1 y Gwendolín Rodríguez, por su evidente desconocimiento
de la problemática de México. A la pregunta del moderador sobre lo que haría
para mejorar la economía , respondió
que “bajando los sueldos de los diputados”. De hecho, a todas las preguntas dio
respuestas subjetivas y por lo mismo, breves, muy breves, hallando buen
respaldo en las críticas al gobierno, aunque no hubiera aportado ninguna medida
de solución...
PREGUNTA
SIMILAR se hizo a Gerardo Salas, enfocada a los sueldos: primero habló de cobrar menos impuestos pero acabó por reconocer
la necesidad de “crear productividad”. Y en efecto, no hay de otra: si se
produce más, se gana más...
LUEGO
VINO LA etapa de las preguntas del público para los candidatos a diputado
federal, y de alguna zona del local que no es nada difícil de adivinar, había llegado
a la mesa del moderador un papelito: “¿Qué valor le da a la mujer”? Zamarripa,
más que enojarse aprovechó la oportunidad para criticar al PAN por valerse de
una situación familiar para intentar desprestigiarlo, en lugar de hacer
propuestas concretas que beneficien a la ciudadanía...
EN
MATERIA DE economía, Gutiérrez Castorena criticó las políticas del gobierno y
los “negativos” efectos en la devaluación del peso; su comentario hubiera caído
bien en cualquier otro lado, excepto
ahí, en Calvillo, el municipio que mayor número de migrantes tiene en Estados
Unidos, que con regularidad mandan una buena cantidad de billetes verdes...
TOCÓ
EL TURNO DE QUE los candidatos se hicieran preguntas entre ellos, y el del PT le preguntó a Salas que si gana, cumplirá la promesa
que hizo en la campaña anterior, de bajar los precios de la gasolina; el del
PAN argumentó que la bancada panista en el Congreso Federal ha intentado esa y
otras medidas pero que ha fracasado porque el PRI-PVEM hacen mayoría, lo que
calificó de “perversidad”...
¡NUNCA
LO HUBIERA hecho! Zamarripa aprovechó para relacionar el término con la cancelación
de la elección pasada: “Ahí está precisamente la perversidad, lo acaba de decir, alguien no quería que ganara
el PRI en Aguascalientes, porque se incrementaría la mayoría”...
CERRÓ
ZAMARRIPA su intervención, repitiendo la vehemente petición al candidato del
PAN: “Dejemos la familia fuera, hagamos propuestas, olvidémonos de las farsas y
las insidias”... Pero Gerardo Salas volvió a guardar silencio, se distrajo
hablando de sus valores –“No vengo por dinero –dijo-, y volvió a la carga con
lo de la “trampa”, y seguramente todos los que asistieron se hacen la misma
pregunta: “De qué trampa habla”?...
FINALMENTE,
FRANCISCO Ruiz, presidente de la Coparmex, calificó el evento de “muy
positivo”. Y, sí, hubo algunos aspectos que lo avalan pero en gran parte sólo
quedará para satisfacción del ego personal de los organizadores, a menos que
tengan planeada alguna estrategia de divulgación. ¡No esperarán que los medios
de comunicación les hagan el trabajo! ¿O, sí?...
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