· Se ayuda a las mujeres a que adquieran seguridad
en sí mismas y posteriormente se les motiva a que aprendan un oficio
· No
importa que en la vida nos hayamos equivocado, siempre se puede retornar a un
camino de luz y esperanza
La
Presidenta del DIF Estatal, Blanca Rivera Rio de Lozano, encabezó la ceremonia
de clausura de la XXIII Generación del Centro de Atención Integral de la Mujer
(CAIM), de la cual egresaron 38 alumnas, y a quienes felicitó por seguir
preparándose para alcanzar su autonomía económica y brindar un mayor bienestar
a su familia.
En
el evento, que se efectuó en las instalaciones del CAIM, la Primera Dama
subrayó que para el organismo este fin de cursos reviste una gran importancia,
debido a que se logró la meta de que sus alumnas hayan adquirido los
conocimientos necesarios en una de tres especialidades que se ofrecen para
buscar trabajo o autoemplearse.
Comentó que nunca es tarde para aprender y mejorar, y por lo tanto agradeció a las estudiantes su confianza en el DIF Estatal para prepararse y terminar su capacitación en los talleres que se ofrecen de Corte y Confección, Belleza y Computación.
En
presencia del Director del Instituto de Capacitación para el Trabajo del Estado
de Aguascalientes, Antonio de la Cerda González y de la Directora del DIF
Estatal, Marcela Durán Madrigal, indicó que este curso que terminó es tan
solo el inicio de nuevas historias de éxito, en donde las egresadas han
adquirido más habilidades para salir adelante.
Resaltó
que para el organismo este programa dirigido a la mujer tiene un gran sentido
social, porque se ayuda a este sector a que primeramente adquieran seguridad en
sí mismas y posteriormente se les motiva a que aprendan un oficio, el cual les
servirá para mejorar su economía familiar.
Mencionó
que en el CAIM se busca transformar vidas, porque las jóvenes que acuden a este
centro encuentran una ventana de oportunidades, se promueve su empleabilidad.
Reconoció
que su gran amor por sus hijos es lo que ha permitido que busquen alternativas
de superación, y terminar este curso sin duda alguna redundará de manera
positiva en la dinámica de su hogar, porque además de un oficio también reciben
otras clases que tienen que ver con su autoestima y desarrollo personal.
“No
importa que en la vida nos hayamos equivocado, siempre se puede retornar a un
camino de luz y esperanza, y agradezco su tesón por superarse”, expresó.
Asimismo,
reiteró que aunque terminen sus estudios el CAIM sigue siendo la casa de todas
sus alumnas y pueden regresar cuando gusten, porque más que una escuela es una
gran familia para las jóvenes y también para sus hijos.
Manifestó
que las egresadas son un ejemplo de alegría, fortaleza y ganas de vivir, por
eso se capacitan para luchar por sus hijos y darles un mejor futuro.
En
el evento, se hizo entrega de 22 certificados del taller de Belleza, 12 del
taller de Computación y el resto de Corte y Confección.
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