Los universitarios
Secretarios de Educación Pública en el IACT y en la UAA
Héctor de León
Quedan agradables recuerdos de varios secretarios de Educación Pública que han visitado a nuestra máxima casa de estudios. En la celebración del centenario del Instituto de Ciencias, investido con la representación presidencial, vino el aclamado escritor don Agustín Yáñez el 15 de enero de 1967. Desde entonces tomó fuerza la iniciativa de establecer en Aguascalientes la primera Universidad pública, sin embargo, debieron de pasar seis años para que el Instituto se transformara en Universidad Autónoma de Aguascalientes.
Después, en 1971, llegó a nuestra casa de estudios el ingeniero Víctor Bravo Ahúja, cuando el Presidente Echeverría buscaba congraciarse con las universidades, y trajo la buena nueva de que la Federación autorizaba medio millón de pesos para que aquí se abriera una Escuela de Medicina, hecho que aconteció el 9 de septiembre del siguiente año en lo que todavía fuera el Instituto de Ciencias, que habría de transformarse en Universidad el 19 de junio de 1973.
Bravo Ahúja también visitó la institución en dos ocasiones posteriores. En 1977 llegó a la Universidad el licenciado Porfirio Muñoz Ledo, entonces secretario de Educación. Eran los primeros años de la Universidad, y con la recomendación del Presidente Echeverría habría de suceder la visita de gobernadores de otras entidades, rectores y funcionarios del más alto nivel porque aquí se había creado una Universidad con una organización departamental, diferente al modelo tradicional de las universidades públicas que se regían con el esquema de escuelas y facultades.
El pasado viernes correspondió la visita del recién nombrado secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño Mayer, que tendría el honor de inaugurar la segunda etapa del Campus Sur de la UAA, e iniciar los trabajos del Consejo de Universidades e Instituciones Afines (CUPIA), que congregó a más de ochenta rectores de las universidades mexicanas.
Mario Andrade Cervantes, rector de la UAA, no se anduvo con rodeos y aprovechó magníficamente este foro para demandar, casi exigir, apoyos extraordinarios para las instituciones de educación superior, y en particular para la Autónoma de Aguascalientes que se encuentra en una etapa crucial por el desarrollo alcanzado en los últimos años con la construcción de un segundo campus, al sur de la ciudad, y un nuevo Bachillerato al oriente de la urbe.
Ahí el rector subrayó que esta reunión representa una oportunidad muy importante para tratar asuntos que son trascendentales para las universidades y, en consecuencia, para los estudiantes que cursan el nivel de licenciatura. Este encuentro confirmó el compromiso de las universidades por construir un México mejor.
No está de más destacar que el secretario Nuño se llevó una grata impresión de la UAA, y aunque no se comprometió en nada, se quedó con la inquietud de todos los rectores de que las universidades requieren de apoyos extraordinarios para cumplir cabalmente con su misión. Mario Andrade confía en que el próximo año habrá buenas noticias para la UAA. (hmdeleon@terra.com.mx)
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