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No engañar a los enfermos


Por Madero 
Héctor Ruiz Esparza 

Aguascalientes, Ags 1 de junio de 2024, d.C. 

Una gran cantidad de historias se repiten todos los días en las clínicas y hospitales del ISSSTE, de pacientes que han esperado meses y hasta más de un año para poder ser operados. 

Los argumentos siempre son los mismos: no hay especialistas, no hay medicamentos, los equipos para estudios están saturados o no sirven por falta de mantenimiento. 

En Aguascalientes durante la semana que acaba de terminar el ISSSTE informó que se reprogramarían las cirugías por mal estado de quirófanos, ya que las salas de operación reportan filtraciones de agua. 

En el mes de mayo, se reprogramaron las operaciones por falta de aire acondicionado ya que no se les había dado mantenimiento. 

El ISSSTE mantiene una plantilla de más de 105 mil trabajadores y recursos materiales y financieros, para dar atención médica, jubilaciones, pensiones, licencias, etcétera a 13 millones 746 mil 170 beneficiarios. 

Que son trabajadores al Servicio del Estado, además de pensionados, jubilados y sus familiares derechohabientes. 

Sólo basta pararse en cualquier hospital de la Ciudad de México o del interior del país para saber que el ISSSTE es, de todas las instituciones de salud del país, la más rezagada en la atención médica. 

Y los que son programados para cirugía, con la mano en el estetoscopio, el o la Jefa les dice tenemos una emergencia. Disculpe usted, pero dese una vuelta el próximo lunes o de plano les dicen “nosotros le llamaremos” 

En otros casos los dejan los brazos y piernas como queso gruyer de tantos agujeros por no encontrarles las venas que en la mayor de los casos es el resultado de la inexperiencia de muchas enfermeras o enfermeros. 

Es verdad que en sexenios pasados se despacharon con la “cucharada grande” en el ISSSTE, al grado de desmembrarlo. 

Lo cierto es que en estos seis años poco se ha hecho en esta institución que atiende a los trabajadores del gobierno, a los que el Presidente ha llamado de manera despectiva “la burocracia dorada”. 

No es posible que, a más de un año de que se decretara el fin de la emergencia por covid-19, todavía se cuente con un rezago en el número de cirugías. Cifras oficiales señalan que se han realizado más de 9 mil 397 operaciones, lo que equivale a un 60%, pero aún persiste un rezago del 40 por ciento. 

En la mañanera del 19 de junio de 2024, la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, señaló que en este sexenio el gobierno federal ha destinado una “inversión histórica inédita” de 30 mil 448 millones de pesos en obras y equipamiento en beneficio de los derechohabientes de todo el sistema de salud para los trabajadores del Estado. 

Según la funcionaria, la inversión entre 2019 y 2024 para este sistema de salud, ha sido 300 por ciento mayor a lo destinado en la administración de Enrique Peña Nieto, que fue de 9 mil 757 millones de pesos; en tanto que con Felipe Calderón se destinaron 17 mil 195 millones para tal fin. 

¿Habrá que creerles? Yo no, en su conciencia recaerá la verdad, pero por lo pronto existen miles de cirugías rezagadas, clínicas y hospitales de la ciudad de México y del interior del país sin mantenimiento y sin medicinas. 


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