Benjamín Ramírez Ibarra, el más grande
defraudador en la historia de Aguascalientes
BENJAMIN RAMIREZ IBARRA, autollamado “El Conde” de
Ojocaliente, oveja negra de la castiza familia, autor de los mayores fraudes de
que se tenga memoria en Aguascalientes, con una filosofía y filantropía opuesta
a la de Chucho El Roto y que había jurado que jamás pagaría fianza para dejar
la cárcel, hoy, “milagrosamente”, está en libertad.
El “Benjamín” de la familia fue apresado al terminar julio
de 2014 (gobierno de Carlos Lozano), luego de una larga historia de fraudes a
familias humildes que data de la primera década del siglo; las convencía de
confiarles su parcela, tras las reformas al articulo 27 Constitucional y las
posteriores reformas a la Ley Agraria para buscarles cliente entre los
desarrolladores de vivienda, y se quedaba con el dinero. El caso por el que se
le giró la orden de aprehensión que lo llevó al Cereso es de un matrimonio de
tercera edad, de San Francisco de los Romo; negoció su parcela, que ahora es un
fraccionamiento, en 9 millones de pesos de los cuales sólo recibieron 250 mil
pesos.
Al parecer la vía que se le abrió para salir libre consistió
en darle opción de resarcir a las víctimas el dinero defraudado. ¿Lo habrá
hecho, hasta qué punto? Las cosas en silencio despiertan temores… y sospechas.
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