en Aguascalientes
*Promedio nacional, sólo 4.86% en febrero
*”Gasolinazo”, la causa; hoy, más impuesto
Juan Manuel Rodríguez (13-03-17)
La tasa de inflación en febrero subió a nivel nacional a 4.86% anual, el nivel más alto desde marzo de 2010 y muy superior al 2.87 por ciento registrado en febrero de hace un año. Los analistas lo atribuyen al traspaso de la depreciación del peso y al aumento de los precios de los energéticos, al “gasolinazo” y al gas que inciden en una tercera parte en la inflación general y, aunque esperaban una inflación de 5.2 % al cierre de este año, la evolución de los precios les hacen temer que sus pronósticos sean rebasados.
Para el Bajío, algunas ciudades ya rebasaron ese pronóstico, entre ellos Aguascalientes. El Ïndice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) de INEGI para febrero, ubica tasas de inflación superiores a la media nacional, entre 4.1 y 6.04 por ciento, muy elevadas respecto al promedio de entre 2.10 y 3.46 %, que registraron un año antes. La mayor inflación en ciudades de esta región la registró León, con 6.04 por ciento, Aguascalientes con 5.88 y Querétaro con 5.30, todas superando el promedio nacional, salvo San Luis Potosí con 4.10 por ciento.
A nivel nacional,preocupa la inflación en la Canasta Básica, que en muy alto porcentaje muchas familias mexicanas no alcanzan a adquirirla con sus ingresos mensuales. INEGI revela que el índice de precios de la canasta básica, que hace un año en febrero había registrado una inflación anual mínima de 1.07 por ciento, el mes pasado alcanzó una tasa anual de 7.65 por ciento.
En materia de consumo es grave, pues entre el 1.19 que aumentaron las mercancías, y el 1.0 por ciento en precios de alimentos y bebidas, el promedio del INPC en febrero fue de 1.11 por ciento “la mayor cifra para un período similar desde el 2000”.
Sin tomar en cuenta que son precisamente el fatídico “gasolinazo” y la depreciación del peso los factores que inciden directa y principalmente en el disparo en la tasa de inflación en México, esta semana, la tercera consecutiva, aumentan impuestos (IEPS) a las gasolinas verde y diesel y se mantendrán hasta el viernes 17. Magna aumenta su impuesto de 3.15 a 3.45 pesos por litro (30 centavos), Diesel de 3.38 a 3.74 por litro (0.36 centavos) y eso que es el combustible que más se consume para transportar mercaderías y personas, lo cual seguramente repercutirá en los precios de los productos transportados. La gasolina Premium se mantiene en 3.64 por litro, que es su tasa máxima para este año. Se acercan a su máximo para este año, la M>agna que es 4.30 pesos por litro, y el Diesel que es de 4.73 pesos.
Una película que ya vivimos
México debe cuidarse para no caer en un peligro al que caimos en una de las etapas más dramáticas que en los dos últimos decenios del siglo pasado sacudió a la nación mexicana: nos referimos al fenómeno de la inflación galopante, que, si bien no es nuestro caso actual, sí es el peor impuesto que se le puede aplicar al pueblo consumidor, sobre todo, al de menores ingresos, que es el más vulnerable.
Alentada por los dos factores que más favorecen la carestía, la especulación y el efecto psicológico que impulsa a subir los precios antes de que lo provoque el costo de los insumos, la inflación en los años 80 era tal, que cuando el Ejecutivo Federal anunciaba aumentos salariales hasta del 30 por ciento a favor de los empleados, cuando éstos lo cobraban, ya había sido anulado su poder adquisitivo por la reetiquetación de los precios en los estantes, aumentándolos hasta en un 50 por ciento.
Afortunadamente no estamos en esa tesitura pero, cuidado, tan ya se están reetiquetando los precios que en el mes de febrero, no sólo el Ïndice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), sino también el índice de Precios al Productor (INPP) nos está advirtiendo de más impactos en el futuro inmediato, pues en este febrero registró 9.46 por ciento a tasa anual, cuando en igual mes de 2016 la cifra para el productor fue de sólo 4.76% anual.
Y ratificamos que los más golpeados son los que tienen menores ingresos, cuando las cifras que difundió el fin de semana INEGI, descubren el disparo del precio en la canasta básica, recordemos que 24 millones de jefes de familias mexicanas, ganan salarios menores a 5 mil pesos al mes.
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