¡"Bienvenidos", señores motociclistas. Qué bueno que vinieron, eh?

Con la bendición Municipal... 

No menos de 300 motociclistas hicieron hoy las delicias de los desmadrosos ciudadanos de Aguascalientes (ya saben como somos aquí),  haciendo rugir sus poderosas máquinas y "quemando" llanta para mayor disfrute nuestro, de transeúntes y asistentes a ceremonias religiosas en los templos por donde pasaban.

En los cruceros, las familias reían alborozadas ante las gracias de los valerosos centauros que arbitrariamente les cerraban el paso, obligando a niños, adultos y muy adultos a soportar el mayor tiempo posible, su bullicioso relajo.

Tres flamantes patrullas de auxilio vial, negras con la franja naranjita entregadas en fecha reciente, y hasta una de la Policía Federal les abrían paso por las calles de la ciudad, mientras los peatones les "apludían" y les mandaban amorosos mensajes familiares.

Minutos antes, el alcalde, Juan Antonio Martín del Campo les dio el banderazo de arranque a su simpático desfile, que vino a llenar de colorido, de humo y de ruido nuestra risueña ciudad.

Los motociclistas son huéspedes distinguidos del Ayuntamiento, al parecer tienen una convención en esta ciudad, así que, no se despidan, seguramente volveremos a disfrutar de su presencia.

En diversos rumbos se gozó del agradable espectáculo de los motociclistas, aunque no en todos los embotellamientos pudieron verlos, ya que sólo les llegó, como en el caso de los ciclones, los efectos.

¡Muchas gracias, señores convencionistas, por su preferencia!