Palabras del Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, licenciado Enrique Peña Nieto, durante el evento: Financiera Nacional de Desarrollo: Transformando el crédito para el campo
Guadalajara, Jalisco, 20 de agosto de 2014
Muchísimas gracias.
Muy buenas tardes a todas y a todos ustedes.
Quiero decirles que me da mucho gusto estar nuevamente aquí, en Jalisco. Y desde esta entidad anunciar importantes apoyos al campo mexicano.
Quiero, en primer término, saludar al Gobernador del Estado de Jalisco, agradecerle su hospitalidad, y el respaldo y apoyo que su Gobierno viene dando a los impulsos y a los proyectos que el Gobierno de la República ha venido llevando a cabo.
En este acto, saludo a los Gobernadores de distintas entidades que participan en este evento.
Al Presidente de la CONAGO.
De igual manera, a los titulares de los distintos Poderes Legislativo y Judicial de esta entidad.
Al señor Comandante de la Zona Militar aquí, en Jalisco.
A todas las autoridades aquí presentes del Gobierno de la República, del gobierno del estado, de los gobiernos municipales, que se dan cita en este encuentro.
Saludo con gran respeto y reconocimiento a las legisladoras y legisladores federales, tanto del Senado de la República como de la Cámara de Diputados.
De igual manera, saludo con respeto y reconocimiento a los dirigentes de distintas organizaciones campesinas, agropecuarias, agroalimentarias, que hoy nos acompañan.
Reconozco también la presencia de dirigentes de distintas organizaciones empresariales de nuestro país, que son órganos de asociación de distintos participantes del sector agroalimentario del país.
Y de igual manera, saludo al Presidente de la Asociación de Bancos de México y a presidentes y directivos de distintas instituciones financieras del país.
Quiero saludar a todos los servidores públicos que participan en este esfuerzo, particularmente de la Financiera Nacional, que acompaña los anuncios que hoy estamos llevando a cabo.
A su Director y a todos los asistentes, a quienes he hecho referencia.
A todos los aquí presentes, integrando el presídium, y sobre todo que están integrando este auditorio. Están aquí no sólo para acompañar estos anuncios.
Están aquí, como se ha hecho ya mención, porque han sido parte fundamental para poder llegar a los anuncios que hoy estamos llevando a cabo.
Lo que habré de anunciar ha sido producto, precisamente, de la coordinación interinstitucional de recoger propuestas, de enriquecer el trabajo de la Financiera Nacional, precisamente para poder poner a disposición del sector primario de nuestro país, nuevos productos financieros.
Quiero saludar con amplio reconocimiento, por su presencia, a toda esta gran representación de las mujeres y de los hombres que trabajan en el campo, en la actividad agropecuaria, en la actividad pesquera, en la actividad silvícola.
Gracias por estar acompañándonos en este evento.
Yo estoy seguro que María Antonia, quien nos ha compartido un testimonio de éxito de una cooperativa integrada por mujeres allá, en el Estado de Nayarit, es sin duda, un testimonio más de los varios que muchos de ustedes podrían dar de lo que ha sido su experiencia en la actividad productiva que llevan a cabo.
Gracias, María Antonia, por compartirla con nosotros y, sobre todo, por ser beneficiaria junto con varios productores que, seguro estoy, lo serán en todo el país, para incrementar el rendimiento de sus cosechas, de la actividad primaria, en la ganadería, en la actividad pesquera que llevan a cabo.
Señoras y señores.
Y señores representantes de los medios de comunicación:
Para esta Administración, las mujeres y hombres del campo merecen todo nuestro respeto. Y, más aún, merecen el respaldo decidido de las instituciones del Estado mexicano.
Por esta razón, para el Gobierno de la República el campo no es una actividad económica más. Es un sector clave para construir el México próspero y de mayores oportunidades que estamos impulsando y que todos queremos.
Si queremos un país con mayor crecimiento económico, necesitamos un campo que crezca más.
Para tener un México más productivo, se requiere elevar la productividad en el propio campo.
Si queremos un México con menos pobreza, necesitamos un campo que genere más riqueza.
Es muy claro. Para mover a México, como nos lo hemos propuesto, tenemos que transformar al campo, apoyarlo con acciones concretas que permitan detonar todo su potencial.
Como ustedes seguramente han escuchado, México acaba de concluir, y así lo he dicho de manera reiterada, un importante ciclo reformador en el que se lograron concretar 11 reformas transformadoras.
Esto, de las reformas, puede parecer a muchos ajeno y lejano.
Ustedes se preguntarán: qué tienen que ver las reformas conmigo. Qué harán las reformas por mí. En qué me van a ayudar las reformas. Y, muy señaladamente, de qué manera apoyarán al campo de nuestro país.
Y la respuesta es directa: Las reformas tienen mucho que ver con todos los sectores de la sociedad, con impulsar nuevas oportunidades, y de manera muy particular, apoyar al campo mexicano, al evento que hoy nos congrega, y apoyar otros sectores de la economía; y, sobre todo, asegurar que las familias mexicanas tengan mayores ingresos; y que el campo, también, tenga mayores beneficios.
Permítanme compartir algunos beneficios de algunas de las reformas, quizá, de las más comentadas y conocidas. Y a veces no las de mayor reconocimiento o las más populares, pero que, sin duda, tienen todas ellas importantes beneficios.
La Reforma Hacendaria.
Lo que busca la Reforma Hacendaria es aumentar los ingresos del Estado para poder invertir más en lo que necesita la gente: escuelas, hospitales, carreteras y apoyos para el campo, para que éste sea más productivo y, al mismo tiempo, se produzcan más alimentos para el país.
Eso fue justamente lo que se logró con la Reforma Hacendaria en nuestro país.
Por un lado, se mantuvo el régimen fiscal del sector primario, con él los pequeños productores del campo, quienes tienen ingresos menores a un millón de pesos anuales, no tienen que pagar impuestos.
Por otro lado, se han incrementado los recursos que destina el Gobierno de la República al campo.
Este año se está apoyando a los productores del campo con 32 mil 700 millones de pesos más de los que se destinaban en el año 2012.
Otra reforma, la de Telecomunicaciones. Con esta reforma, a partir del 1 de enero de 2015, el próximo año, los mexicanos ya no tendrán que pagar larga distancia nacional, ni en su teléfono fijo ni en su celular.
Éste es un gran beneficio para los productores del campo, porque ahora pagarán menos por las llamadas que hagan a sus proveedores que se ubiquen fuera, o cuando comercialicen sus productos en otras poblaciones o estados.
Igualmente, con la Reforma de Telecomunicaciones, quienes viven en comunidades rurales tendrán mejor señal y más opciones para contratar servicios de telefonía fija o telefonía celular, y también para tener Internet y que sus hijos se puedan conectar a una red global de información y de conocimiento.
Y la tercera reforma, mencionada o de mayor conocimiento, la Reforma Energética.
Con esta reforma, lo he dicho una y otra vez, porque es consecuencia de la aplicación de la reforma, habrá más gas y, con ello, el país, gradualmente, le va a costar menos generar electricidad.
Con este ahorro, Comisión Federal de Electricidad le podrá cobrar menos a la gente, y las familias pagarán menos por la luz.
Esta reforma, también establece una nueva e importante fuente de ingreso para quienes viven en el campo. En los casos donde se produzcan energéticos en sus tierras, sus propietarios recibirán un pago justo, equitativo y transparente.
Y, finalmente, con la Reforma Energética, también se reactivará la industria nacional de fertilizantes. Ello reducirá su costo y más productores podrán comprarlos para tener mayores rendimientos en sus cosechas.
Más allá de todos estos beneficios, hoy, nos reúne aquí, en Guadalajara, una reforma, como ya lo dijo el Secretario de Hacienda, menos conocida, menos polémica, pero de enorme trascendencia e importancia: la Reforma Financiera.
Como aquí se ha comentado ya, esta reforma permitirá que en México haya más crédito y más barato, especialmente para las micro, pequeñas y medianas empresas, que son las que generan casi tres de cuatro empleos en todo el país, y también, y muy señaladamente, para los productores del campo.
En cualquier parte del mundo, donde el campo es productivo y próspero, se debe a que ha sido respaldado con crédito y financiamiento suficiente y adecuado.
Por eso el campo de México no crece como debiera, porque en materia de financiamiento hay poco crédito bancario y el crédito de la Banca del Estado, de la banca pública es caro, de corto plazo y con requisitos excesivos.
Gracias a la Reforma Financiera esto va a cambiar. Al poner la Reforma Financiera en acción, el campo mexicano, ustedes, los productores, van a tener más crédito, con menor tasa de interés y a mayor plazo, y con menos o menores requisitos.
Esta reforma transforma a la anterior Financiera Rural, en la nueva Financiera Nacional de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal y Pesquero. Quizá sea más fácil llamarlo por su nombre más corto: la Financiera Nacional.
Será, a partir de ya, como lo viene siendo, una verdadera institución de fomento al desarrollo integral del campo, y la mejor muestra de ello es el nuevo programa de la Financiera Nacional de Desarrollo que hoy estamos poniendo en marcha.
En coordinación con las organizaciones de productores, los gobiernos estatales y los intermediarios financieros privados, diseñamos este programa en respuesta a las necesidades reales de los productores rurales de México.
En qué consiste este nuevo programa.
Primero. He instruido a la Financiera Nacional a que, a partir de ya, de hoy mismo, el crédito que otorga al sector primario tenga una tasa de interés de un solo dígito. Esto significa que todos los productores agropecuarios, silvícolas y pesqueros tendrán tasas menores a 10 por ciento anual.
Esto por sí mismo implica un ahorro de hasta 40 por ciento, ya que actualmente las tasas en promedio son de 14 por ciento.
Segundo. Este programa tiene un producto especial para pequeños productores, que les ofrece créditos hasta por 230 mil pesos, con una tasa preferencial aún más baja, de siete por ciento anual como máximo.
Y, María Antonia, para las mujeres tengo un anuncio aún mejor que hacer.
Para las mujeres, para las pequeñas productoras del campo, tendrán un descuento adicional de medio punto porcentual en las tasas de interés. Para ellas la tasa será de 6.5 por ciento anual.
En pocas palabras, y que no quede duda, el Gobierno de la República, el Gobierno que encabezo, se la juega con los pequeños productores y, sobre todo, se la juega con las mujeres del campo.
Ahora, es importante señalar. Muchos se preguntarán de qué servirán estos créditos baratos si para obtenerlos tuvieran que dar en garantía su casa o su tierra. Por eso, ya no se requerirá ninguna garantía real.
Esto significa que ya no tendrán que poner en garantía su patrimonio, sino solamente su propia cosecha.
Otro aspecto importante es que el Estado va a dar las garantías necesarias para que los intermediarios financieros privados también otorguen créditos directos en las mismas condiciones preferenciales que a partir de hoy brinde la Financiera Nacional de Desarrollo.
Ese es el propósito del convenio que aquí se ha signado, el respaldo de los gobiernos estatales, sumado al del Gobierno de la República, precisamente para ampliar las garantías a la banca privada y puedan otorgar créditos en iguales condiciones a los que otorgará la Financiera Nacional.
Tercero. Para capitalizar adecuadamente al campo, también se establece un producto de financiamiento de largo plazo.
En esta modalidad, esto es una buena noticia, el crédito tendrá plazos de hasta 15 años para que los productores puedan invertir en la compra de equipo o infraestructura, en sistemas de riego, redes de frío y áreas de almacenamiento de granos.
En total, durante 2014, con estos nuevos productos financieros, la Financiera Nacional de Desarrollo otorgará 44 mil millones de pesos en créditos al campo mexicano.
De esta manera, con iniciativas innovadoras como las que aquí he compartido con ustedes, ponemos la Reforma Financiera en acción y damos pasos firmes para apoyar al campo y lograr un México más próspero.
Señoras y señores:
Con la Reforma Financiera se abre una gran oportunidad para modernizar nuestro campo y lograr que México repunte como uno de los principales productores de alimentos del mundo.
En el Gobierno de la República estamos trabajando para poner todas las reformas en acción, porque todas son importantes y porque todas, y esa es la más firme convicción que tiene el Presidente de la República, tienen importantes beneficios para todas y todos los mexicanos.
Reitero mi compromiso aquí, desde Jalisco, con esta entidad, con todo el país y muy señaladamente con quienes producen en el campo mexicano, con quienes realizan actividades en el sector agroalimentario, porque hoy lo que hemos anunciado, sin duda, les permitirá producir más y asegurar que tengamos un campo más productivo, más justo, más rentable y sustentable.
Muchas felicidades y muchas gracias.
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